El Banco Central de Brasil elevó la tasa de interés básica Selic en 0,50 puntos porcentuales, llevándola a 11,25%, en respuesta a la inflación persistentemente elevada. Esta es la segunda alza consecutiva en el ciclo de ajuste iniciado en septiembre, cuando la tasa subió 0,25 puntos. La decisión responde a factores como la alta inflación, la presión del dólar, el encarecimiento de la energía y un mercado laboral sobrecalentado.
La inflación en Brasil alcanzó el 4,42% en 12 meses, impulsada por el aumento en los precios de alimentos y energía, debido a una sequía histórica. Aunque la inflación se encuentra dentro del margen de tolerancia (4,50%), sigue por encima de la meta de 3%. Para 2024, el mercado proyecta una inflación del 4,59%.
La economía brasileña ha mostrado un crecimiento del 3,3% en el segundo trimestre de 2024 y un pronóstico del 3,10% para el año completo. El desempleo también disminuyó a 6,4% en el trimestre de julio a septiembre.
El ministro de Hacienda, Fernando Haddad, ha suspendido un viaje a Europa a solicitud del presidente Lula da Silva para definir un paquete de recorte de gastos con el fin de cumplir la meta fiscal, cuyo anuncio se espera en los próximos días. Mientras tanto, el dólar, que había alcanzado los 5,86 reales, cayó un 1,48% en expectativa de estos anuncios.
